8.13.2004

Viernes 13.

Miiisssss, dice una niña en la primera fila con blusa verde fosforescente, are you superstitious? Sin saber bien por qué motivo, le respondo medio dormida, medio endolacada: Nope, and actually I'm having a wonderful day. Si pudiera contar como superstición, lo único que de alguna forma me altera, es soñar que se me han caído los dientes. Cuatro veces en la vida he soñado que se me caen los dientes. En las cuatro ocasiones alguien que conozco ha muerto poco después: Mi abuelo, el padre de mi tía Carmen, Tío Pepe y Ricardo. Antenoche soñé que se me caían los dientes y francamente me sentí mal todo el día. Anoche murió alguien en uno de mis sueños. Si así va a cumplirse mi profecía, nadamás en un sueño, me da gusto. De otra forma estoy asustada. Nunca había soñado un cadáver. Nunca había tocado, ni siquiera en sueños, a una persona muerta. Era una joven que conozco poco. Se llama Julia y me sentí preocupada.
PS: Nunca ha sido mi intención confundir a mis lectores. Acuso recibo de dos correos de lectores confundidos y prometo aclarar pronto el punto.