4.15.2008

nonsense

Tomo mi bolsa y me bajo. Van a ser las nueve de la noche. Una franelita se agita enfrente mío. Son treinta pesos amiga. Sonrío. Aquí hay un parquímetro, es lugar permitido. Y no se paga parquímetro después de las siete. No amiga, son treinta. ¿Vienes al Neuquén, no? Le pongo la alarma al auto y lo miro. Así no le pasa nada, yo me hago responsable. Es entonces cuando deja de agitar la franelita y empieza a menear un gafete. ¿Y tú quién eres?, me hago la occisa. Yo vivo por aquí amiga, y con treinta pesos no le pasa nada. ¿Y dónde trabajas? Aquí, aquí estoy todas las noches. ¿Pero quién te dio ese gafete o qué? Yo vivo aquí amiga, son treinta pesos y otra vez el gafete. Por eso, ¿quién te dio el gafete? Es bien difícil, tiene uno que juntar firmas y todo. Pero quién te lo dio. Es para que no le pase nada a tu coche, yo vivo aquí nomás. Abro la bolsa, me gusta mucho mi coche. Vuelvo a intentar. ¿Pero a tí quién te autoriza o qué? Pues es que juntas las firmas y es bien díficil, tienes que ir a la msñTEmshnEME y de ahí pagas cuatrocientos pesos y ya te la dan. ¿Cómo ves, me das treinta? Le pongo veinte en la mano. Es todo lo que traigo. Ándale pues. Que lo pases bonito.

Urgh.