3.31.2005

sexenio

 Entonces, ahorras un poquito y vienes una, dos semanas a París. Nos tomamos un pastis, y te quedas en mi departamento y platicamos. Me cuentas qué has hecho en estos seis años. En el verano, nos sentamos en un café al aire libre y si vienes en agosto nos vamos a Italia a que yo termine mi certificado y tú te pongas a escribir cosas y por las noches me platiques de tu corazón partido a cachitos, de cómo nunca fuiste la misma, Chica Violencia. Nos sentamos a la orilla del Seine y hacemos un balance del cambio. Fuimos en tu auto de estudiante a votar al aeropuerto, ¿lo recuerdas? Tan bonita y tan priísta, chica literatura latinoamericana lentes caros. ¿Veinte años, dices? Con razón, con razón todo aquello. Ya tengo treintaytres, pero eso no importa. Importa la sierra de Durango y tu falda verde y tus argumentos. Ya no te voy a pedir que me leas la jornada mientras te preparo de comer morenacha intelectual, nos comemos un panini en la seine, y tú te imaginas que eres la maga y yo te canto sones cubanos y dos gardenias hasta que se termine el sol. Hasta que nos terminemos todo el sol que haya en París y nos calentemos con el que había en Monterrey cuando Fox ganaba las elecciones y tú escribías un ensayo sobre Rosario Castellanos. ¿Te parece chica violencia, un informe de gobierno desde el exilio?

2 Comments:

Blogger Roberto Iza Valdés ha dicho...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

10:34 a.m.  
Blogger Roberto Iza Valdés ha dicho...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

2:52 p.m.  

Publicar un comentario

<< Home