2.23.2005

old saint patrick's

El frío se queda ahí, con los muertos. Estoy fumándome un desayuno
envuelto en café y humo. Mi ventana da a la calle, pero al cementerio
también. En la calle ya no hay nieve. Del otro lado de los ladrillos,
donde están los muertos, la nieve sigue. Allá no hay palomas ni
muchachas con botas rosas. El frío se ha quedado ahí, blanco, sin
moverse. Yo estoy por encima de eso. Lo miro todo. El manto que cubre
a los muertos desconocidos. Los árboles sin hojas. Ahí ahí ahí es
donde se queda el frío, la muerte.