2.01.2005

odio reiterado

Los amo. Los odio. Los amo otra vez. Los odio. Hoy los odio. Argh. Me sacan de quicio. Hoy, función doble, permanencia voluntaria donde el doctor. Primero a la vacuna para le meningitis. La necesitas. No la necesitas. La necesitas. No la necesitas. Cuesta noventa dólares. Luego en un episodio de ER se muere un muchachito porque le da la meningitis y la que lo besuqueó casi casi también. Uno nunca sabe qué traen los que uno se besuquea. No que me haya besuqueado a alguien (todavía), pero no vaya ser. Me pasaron, me dieron cuarenta hojas que describen los riesgos de no tomar el piquetito, los riesgos de sí tomarlo, los de la meningitis en general, las probabilidades, los disclaimers, etc. Me dan paletita, me cobran y me despachan. Segunda parada. Desde el jueves me duele la garganta. El flasmeis dice que por que se menfriaron los pies el día de la fiesta. Luego dijo que porque habíamos ido a comer hamburguesas caminando la otra noche. No mentiende. Por eso uno no senferma. Ni por andar descalzo, ni adentro ni en la nieve. Esta mañana, la garganta cerrada todita. No tengo tos, ni bocos. Nomás cerradísima la garganta, horrible. Ya mucho té. Ya mucha miel y limón. Dolor de espalda. Me pongo a leer la tarea mientras espero. Espero como una hora. Lleno un montón de formas. Sí, sí, sí. Firma, firma, firma. Me llaman. Me interrogan. Tengo fiebre. Poquita, pero tengo fiebre. Me doy cuenta de que a la hora de explicar lo que me duele, tengo un acento. La enfermera también se da cuenta y me pregunta si sé a cuánto equivale en Celsius la temperatura que tengo. Le digo que entiendo que eso es más de lo que debería ser. Asiente, dice que va a buscar la tabla de conversiones. Estoy cansada, no la detengo. Espero otro poco. No entiendo esto que tengo que terminar de leer antes de que sea la hora de mi clase. Faltan cincuenta minutos para mi clase. A lo mejor no la voy a hacer. Son seis calles hasta mi salón. Me llaman por mi nombre. Arrastro mi abrigo y mis libros y me desplomo en la mesa de exploración. Se llama Alecs. Trae una camisa Ralph Lauren azul. Aysh. Acuérdate, acuérdate, no le interesas tú, nadamás tu caso. No importa que te llame por tu nombre y te pregunte muchas cosas. El protocolo, chiste incluido. Uno, dos tres. No, no toso. No, tampoco estoy borbada. La garganta. Mucho. Harto. Parsimoniosamente me explica para qué sirve la tablita de madera (oh honey), me pide que diga aaahhh. Aaahhh. Se le cae el cucuruchito desechable que se le pone al otoscopio. Entonces empiezo a sospechar. Ligero smirk al interior. ¿será? Me vuelve a preguntar las mismas cosas pero alrevés. Mi historia sigue siendo la misma. Me pregunta en qué escuela estoy, qué estudio. Si salgo mucho. Si vivo con alguien que esté enfermo. Sí, pero no estoy segura de que tenga lo mismo. Se acomoda los lentes. Me dice que quiere escuchar los pulmones. El suéter es muy grueso. Can you, would you, I mean, just the back...El turtleneck escala pudorosamente hasta los hombros. One breath. Two. One more. Deep breath. Again. Ok, then. Giro. Lo miro a los ojos. Entonces tiene una regresión. Tartamudea. No es el tartamudeo del que está inseguro, del que atropella con las ganas las palabras. Este es el tartamudeo encarcelado de la niñez. Del niño tartamudo que toma a las sílabas repetidas y las esconde hasta abajo del cajón. Del adolescente inseguro que poco a poco envuelve la vergüenza y aprende a hablar fluidamente. Siento pena. Bajo la vista. Él también. El cucuruchito sigue en el piso. Lo levanta, me dice que ya vuelve. Aprovecho y regaño bajito al cuerpo. Es un doctor!, no se vale. No, no todos sirven para lo mismo, ya te lo había dicho. Aunque usen camisas Ralph Lauren azules y te hablen bonito. Ya, a ver,siéntate bien que va a regresar. No le vayas a poner otra vez los ojos en los ojos porque mira lo que le pasa, ok? Regresa con la doctora grande, es china. La doctora me habla fuerte, me hace el swab. Wait, you are taking my throat there! Five minutes, dice la doctora china. Todos son chinos aquí y hablan en monopalabras. Come back, five minutes. Ok?. Perform swab and then come back. Se marchan los dos. Las botas me quedan colgando. Vuelven los dos. Cuerpo jorobado se siente mareado. Negative, ok. All negative, no strep. You can go now. Y se van a anteder a otros cuerpos. No receta. No recomendaciones. Nada. Vámonos cuerpo, aquí no nos entienden.
Firmamos las formas, llenamos las hojitas. Tengo calor. Arrastro el abrigo, el sombrero, los libros.
Y todo pa ná. Ni un mejoralito, ni una nada me dieron. Ches dotores.