cenicienta
El sábado amaneció precioso. Eso y el flasmeis puso música desde temprano y antes del mediodía ya iba yo en chors y tacones al banco. Rico, caminar entre la gente y mirar los puestos de aretes y pulseras y collares y un trío de negros cantando afuera de J. Crew. De regreso cruzo Greene sobre Prince. Pie derecho, pie izquierdo, tacón verde sobre las baldosas. Tacón izquierdo tacón de-re-. Atorado. El semáforo cambia de color. Ay. Ay. Regreso el pie izquierdo junto al que se quedó atrás y nada. No se mueve ni tantito. Voy a morir atropellada. Guapísima, pero atropellada. May I help you with that? Un hombre hermoso ofrece rescatarme. En una ciudad como esta, uno tiene primero que dar consentimiento antes de que cualquier desconocido se anime a portarse heróicamente. Please do. Se agacha. Me toma el tobillo. Los transeúntes contienen la respiración. Urghargaysh y el tacón es liberado. Thank you. Él sigue su camino y yo me quedo como Cenicienta urbana, en chors y tacones. El sábado pinta bien.
Etiquetas: niushorc
2 Comments:
le hubieras dado el sí right then and there
como en una peli de J.Lo...
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