8.04.2003

El sábado, girl's night out. Normal, relativamente tranquilo. Luego, quién sabe por qué, de dónde, me salió el valor, las ganas de decir, de pedir. Pero no pedí. Nadamás dije. Claudia me regaló después un abrazo consolador, y las palabras de la amistad. Qué alivio poder refugiarse en el baño de aquel bar y escuchar una voz amiga. "Vas a estar bien". Sí.