1.29.2004

Esto del ejercicio me hace sentir de verdad una persona así, como, pues como persona. Actividad social, compartida. Aunque la verdad no socializo mucho, pero bueno, hay más gente. No me gusta la música, es lo único (bién golósa, tú erej bién golósa...). Pero está chido ser productivo, liberar toxinas, sentir el cuerpo. Las manos de repente eso sí, se me hinchan y se me ponen rojas. Siento que me me van a brotar los cuadritos. Están a punto. Los siento venir, en mi acdomen...Yo creo que ya mañana me salen.

Etiquetas:

1.28.2004

Qué día. Qué día.
Qué susto. De pronto pensé que todo había desaparecido.

1.27.2004

Qué horror. Espero que no sea siempre así. Hoy la inauguración del aerodance(*) supuso un interludio entre una junta y más trabajo. Yo quería que fuera más bien la indicación de mi hora de salida. Y heme aquí, en tenis y ponytail terminando de contestar mails atrasados, imprimiendo un caso y elaborando las notas de enseñanza. Muy mal, muy mal. Me duele la espalda. Tengo frío y hambre y más me vale terminar pronto. Mañana voy a enseñar un caso en una clase avanzada de universidad. Tengo miedo y no. A ver qué sale.
----------------------------------------------------------
(*) El aerodance, just for the record: NO implica el uso de arneses ni movimientos à la Cirque du Soleil. NO es en traje de baño (¿me oíste?). El aerodance es una de esas cosas de las que hoy no tengo ganas de hablar. Volver a este sitio más tarde para ver si ya se me dio la gana.
Qué capacidad impresionante tiene el café para lograr lo imposible.

1.26.2004

Dices questoy reloca (pensé que eso ya había quedado establecido desde hace mucho). Ahora tienes más elementos para decirlo, parece.
Parece que es esa otra pieza de información que ocupa mi cabeza desde ayer.
Faltan 94 días.
Ayer fuimos a comer. Llego y hay cinco mujeres con cara de Sex and the City en la terraza del lugar oriental ese. Hace sol. Todas traen lentes y están fumando. Se ven rebién. Puro glamour. Desayuno una cerveza. Son las cuatro de la tarde casi. Qué rico es esto. Hablamos sin decir nada realmente. No hemos venido a eso. Estamos aquí para comer y sentarnos en el rayo del sol en este lugarcito tan bien. Tengo miles de cosas qué hacer. Cosas importantes de veras. Ni modo. Estoy aquí. Es domingo.

perdidos

"Uno para Perdidos en Tokio, por favor". La mujer de la ventanilla finge que no le importa, pero me mira dos veces antes de darme un boleto solitario. Sólo alcanza a ver mi blusa de cuadros (qué bonita elección, una blusa de botones de presión, como vaquera, de líneas y cuadros lilas y acquas y ocre), y mis labios brillosos sin color, y la chaqueta de mezclilla. Bajo la blusa no hay nadamás que mi cuerpo que hoy se siente un poco más flaco. Entro. "Bienvenida. Que se divierta. Sala nueve al fondo". Nunca había puesto mucha atención en esa fórmula repetida tantas veces. Mis tenis Nine West color chocolate se sienten deliciosos. Espero que no se acaben nunca. Quiero palomitas. Y Coca-cola. ¿De verdad quiero Coca-cola? Sí, de hecho ya la compré. Me detengo a pensar. ¿Entro de una vez a la sala o no? Mh. Qué chistoso. Tampoco eso lo habìa hecho nunca antes. En fin. Me voy a Japón con Sofía. Quiero poder contar historias así. Sin contarlas. Mostrando. Me duele la cabeza pero no puedo irme. Los colores, la textura. Estoy viendo Tokio desde la ventana de mi hotel. Luego desde un taxi, las luces que pasan y pasan. Así me siento muchas veces. Luego, cuando empezamos en un bar y acabamos en un karaoke me siento terriblemente mal. La cabeza va a explotarme. La música, estas personas que apenas conozco, pero que han sido tan amables conmigo. Y no puedo moverme. Me quedo mirándolas cantar. Están borrachas. Tengo un poco de frío en la espalda nadamás. Mi rostro se siente pegajoso. ¿Qué horas serán? Subo los tenis al asiento de enfrente. Ya sé que está prohibido, pero no hay nadie que se atreva a decirme nada. La película es mía. Ya no quiero palomitas. Va a explotar. Tuntuntuntuntuntuntuntuntun. Qué fuerte. ¿Qué será? El pasto es demasiado verde. ¿Cómo se escribe un verde tan verde, tan en silencio contra una montaña. Hoy ví una montaña pasar. Coldplay a todo volumen. Yo atrás, hundida en el asiento trasero. Mis dedos describen palabras que no quiero olvidar en el cuero blanco sobre el que mi cuerpo está abandonado desde hace rato. Una montaña va pasando y me doy cuenta de que es la primera vez que la veo. Que la veo así. Queda muy poco sol, pero es suficiente para ver la montaña pasar. Enfrente están Claudia y Adriana. Se están riendo de algo que no entiendo. Pero no me importa. Quiero quedarme con esta monaña, abrazarla, seguir oyendo a Coldplay. Pero no se puede porque estamos buscando un café y un postre. Quiero una tarta de manzana que aquí no hay. Mi cabeza está mejor que ayer. Creo que volví hoy.

Etiquetas:

1.24.2004

lost in translation

Hoy no debería de haber sol. Hoy debería de estar lloviendo como ayer. Haciendo mucho frío, como anoche en la madrugada. Pero no. Salió el sol, hace bueno. Y yo que quisiera seguir en pijamas todo el día. Y yo que no tengo ganas más que de estar tirada todo el día. De comer y comer y dormir y dormir. De no pensar. De disfrutar la almohada y no tener que bañarme. Pero ha hecho bueno, y eso me imagino que está bien. Así que he de bañarme, y sacudirme este dolor de cabeza y acabar con el hambre y todo esto. Por eso voy a tener que despojar al cuerpo de su envoltura tan cómoda, a obligarlo a entrar en la regadera, a hacerle cariños para que no se queje. Darle dos pastillitas pequeñas para que se contente, para que me quiera acompañar al cine. Lo voy a cortejar con una baguette con tres quesos y después, entonces, tendremos una cita él y yo. Iremos mi cuerpo y yo al cine. Tengo curiosidad de ver esas primeras escenas de la protagonista en ropa interior de las que tanto he oído. ¿Cuántos meses tengo esperando esta película? Muchísimos. Desde el año pasado, desde tal vez agosto. Tal vez desde antes. Me merezo verla sólo yo. Porque esta película es mía nadamás. Por eso.

Etiquetas: ,

Me he dado cuenta de que tal vez deba retomar el tema de la metrosexualidad por acá. La verdad es que hace mucho que me aburrió. Sin embargo, en la última semana tres personas han visitado este sitio porque buscaron "metrosexualidad" en Google. Y a final de cuentas, aquí a la derecha digo que soy "observadora mexicana de la metrosexualidad". Aysh. También digo "chica violencia", y eso es algo que pasó hace ya muchísimo tiempo. ¿Cómo empezó esa efímera vocación de antropóloga eslash socióloga contemporánea de la metrosexualidad? Con el New York Times, el año pasado, en el verano. Si hace algunos meses no hubiera cometido una estupidez y borrado involuntariamente algunos de los archives, podría referir a los internautas interesados hacia dicho post. Pero, desafortunadamente, no están ya. Estaba en el NYT. Rafa dice que tengo una capacidad muy grande para saber cosas inútiles, para encontrarlas. Creo que estoy de acuerdo con él en lo de la capacidad muy grande. En fin. Hubo un artículo que me llamó mucho la atención, particularmente porque al leerlo reconocí que conocía a varios especímenes. Inmediatamente hice circular el artículo entre mis conocidos más cercanos, muchos de los cuales se identificaron con los atributos del metrosexual: Profesionistas veinteañeros con un sentido refinado del estilo (y el glamour en algunos casos), la moda y el buen gusto. Todos preocupados por verse bien, por tener los productos que los harían verse bien. Todos machos incomprendidos que caminaban peligrosamente ante los ojos de la gente (de "la sociedad") por esa delgada línea que separa a los hombres straight de los gay....

La verdad estoy cruda y quisiera mejor dormirme otro rato. Lo siento mucho. Terminaré después.

1.23.2004

Conclusión muy breve del miercolitos que se llevó a cabo extraordinariamente ayer: Estar saliendo con alguien, en ese caso particular, significa que pueden besarse en sus bocas.
Pruebas físicas superadas. ¿Superadas? Pues ya pasaron, pues. Era lo único que me importaba. En fin. Cuántas cosas qué hacer y no sé por dónde empezar. Son cosas administrativas y urgentes, y luego cosas académicas e importantes y personales de todo tipo y aaaaaayyyyyyyy. Necesito un clon (¿una clon? ¿una clona?). Ok. Digámoslo de este modo: Necesito clonarme. Perfecto.

1.22.2004

Hoy tengo las pruebas físicas otra vez. El semestre pasado no fui. Decidí que no valía la pena el estrés de ir, así que me lo ahorré. Esta vez no. Voy a ir a hacer galartijas y acdominales y a darle muchias güeltas al estadio. A pasar la humillación de que midan mi grasa corporal en público. Qué horror. Luego voy al miercolitos que ahora va a ser en jueves. La convocatoria empezó a tener respuesta cuando anunciaron que se hablaría de sexo, drogas, amoríos y rocknroll. Of course. Necesito tomar menos café. Me gusta ir a juntas. Hace frío.

1.19.2004

Parece que ya va a ser oficial. Al menos, cuasi-oficial. No sé exactamente qué se necesita para que sea oficial. Soy una zonza declarada (pero conste, no por mí, faltaba más). Lo avalan las opiniones médicas, los diferentes medios de comunicación, los círculos académicos locales, mi madre desde hace años, y creo que ahora empiezo a entender muchas miradas que siempre supuse eran de asombro ante alguna otra característica menos vergonzante. Y nada. Resulta que en realidad todo es por mi zonzez (sonzes? zonsez?). Es clínica, mediática, científica. Oh epifanía. Ahora pues, tal vez lo que sigue es averiguar la causa. ¿Para remediarlo? Mh. No sé. Todavía no estoy segura. Parece que me gusta, aunque apenas la estoy estrenando (bueno, de manera ya consciente, asumida, pues). Necesito caminar en ella unos días, probarla, ver cómo se me ve, si me va o no. En fin. Que me siento como niña con juguete nuevo. Qué rico. Tengo algo que suena chido (me gustan las zetas, como en mi nombre), que es mío.
Creo que sólo faltaba asumirlo para que fuera oficial.

PS: Alguien me aclaró que a lo mejor es porque me he vuelto (muy) cursi.
Pensándolo bien, creo que hoy tengo ganas de un corte de pelo. Mh. No lo había pensado tanto, pero tal vez eso es lo que quiero hoy. Hay tantas cosas que quisiera normalmente. Creo que hoy nadamás tengo ganas de cortarme el pelo. Todavía no estoy tan segura. Todavía no me consta. Necesito deliberar con mi cuerpo. Ver si al cuello, a la clavícula les parece. Mh. A lo mejor me hace falta un corte de pelo. Tal vez, tal vez. Pero, ¡me ha crecido tanto! Ya empecé. Las malditas indecisiones otra vez.
Ayer fue un d?a chido. Me di cuenta varias veces. Cuando me despert? abrigada con las palabras de la noche anterior. Cuando me vi en el espejo. Cuando me puse
los zapatos verdes. Cuando me dio hambre y pude comer la hamburguesa que quer?a. Cuando me tuve que poner los lentes porque hac?a mucho sol. Cuando alcanc? a hacer las cosas de la preparaci?n de clase en un dos por tres. Cuando le cambi? a la estaci?n de radio y escuch? completita: " Love is in the air". Me pone muy de buenas esa canci?n. Ayer me puso muy de buenas. Ir muy r?pido por L?zaro C?rdenas, con un clima agradable, como de primavera, sentirse bien, haber comido, saber que las amigas est?n esperando para hablar de cosas intrascendentes, que la noche anterior salieron las cosas tan bien. Aaayyy ( inserte suspiro satisfecho aqu?).
El otro día tuve un examen en donde me preguntaban "Qué hace que un regalo sea especial, que lo recuerdes?". MH. ¿Qué regalos recuerdo?
- Los aretes que me dieron ese día, que luego perdí allá y que encontramos inmediatamente en el taxi.
- Los cuadernitos: el de Jordi, el de Imaginary Men, el de Toulouse (el de portada de hoja como de tamal, jaja).
- El collar de coral que vimos en el mercado aquel y que después olvidé y luego recibí. Luego, la pulsera a juego, sin querer.
- Una extensión de teléfono en mi cuarto, cuando cumplí catorce.
- La fedora anaranjada que resultó ser crusher hat.
- La blusa de crochet beige.
- Las cuatro barras de mantequilla de Falfurrias.
- Colors, de Benetton.
- My Little Pony blanco con pelo morado, el de la luna y las estrellas.
- Una máquina de escribir que tuvimos que regresar porque nunca funcionó.
- El peluche blanco que me dio de navidad una alumna del INEA.
- Uysh. Tengo sueño. Esta lista va a tener que quedar pendiente. Ni moros.

1.15.2004

Ayer, estrepitoso fracaso del club de vino y queso (a.k.a miercolitos). Parecía aquello un desfile de histerias profesionales de muchachias veinteañeras de provincia. De tragedias oficiniles y frustraciones variadas. Había vibra menopáusica. Definitivamente, concluímos alegremente, estamos hechas para el amor, no para la autosuficencia. Ah, dice Shamán, pero querían estudios, ¿verdad? Querían ir a la universidad y esas cosas. Pos ya ni modo. Porque ya no hay patrás. Ya no aprendieron a barrer ni a planchar ni a coser. Se friegan.

1.14.2004

Hoy amaneció día ARGH, aunque lentamente se está convirtiendo en día AYSH. Todavía no puedo poner en palabras la diferencia, pero tal vez hay alguien que también entienda la diferencia entre uno y otro. Despertar temprano, no problem (not that much). Meter el cuerpo a la regadera, ok, no hacía tanto frío. Vestirlo,mmhhh. Lo que elegí anoche no gustar. Hoy no me sentía verde con beige. Nada combina, nada me queda, nada me gusta, no hay blusas planchadas, ni tiempo para planchar. Luego, los accesorios proyectados no están por ninguna parte. Necesito café. Afuera está lloviendo y el tráfico está imposible. Muy pronto me doy cuenta de que definitivamente no voy a llegar a tiempo. Celular suspendido, sin manera de avisar para que manden a mis alumnos a la biblioteca o los entretengan de algunaotra forma. Segundo día y ya quedando mal. Alumnos impacientes, autoridad escolar molesta. ¿Cómo se dice atolondrada en inglés? Alumnos demasiado despiertos para ser tan temprano. (Imagino que la perspectiva de hora libre los ha entusiasmado). Son demasiados. Yo soy sólo una. A veces. Fotocopiar material, saludar antiguos alumnos que me esperan en el pasillo. Me gustaban un poco más esos. De repente parece que todo se va a componer. Están regalando libros en la biblioteca. Yo ya pensé que quiero a Lacan y a Toril Moi y varios más (tengo derecho a 5). Damn dude. No hay nada. Puras cosas aburridas. De educación y tecnología y diseño de currículum (incluye "La educación encierra un tesoro"). Me voy con cuatro de puro compromiso. Sigue siendo tardísimo. Sigue lloviendo horrible. Sigue doliendo la parte posterior inferior derecha del cuello (seguro tiene nombre). Llego. QUé lata maniobrar paraguas, bolsa, llaves, credencial, celular, libros, zapatos complicados. Luego toda la mañana gente que viene a verme en voz alta. ¿Qué no saben que estos cubículos están compartidos? ¿Que hay más gente trabajando? ¿No les dice nada el hecho de que yo les contesto con susurros? ¿Tiene todo mundo que enterarse de tanta cosa? ¿Tienen que hablar tanto?

1.12.2004

Qué frío tengo ahora mismo. No está prendida la calefacción. La chaqueta que llevo encima del pull cuello bateau blanco que me gusta no calienta. Hoy me gusté en el espejo. Hoy tuve ganas de comprar una cafetera. Hoy sentí que podía levantarme como la gente normal que además de arreglarse por la mañana tiene tiempo de preparar un café y mirar en la tele las noticias. No como yo que siempre ando en penumbras, postergando encender la luz. Encendiéndola a medias quién sabe por qué razón, saliendo apresurada y olvidándolo todo. Hoy fueron las llaves. Lo demás estuvo bien. Llegué raspando. First day. Difícil saber cómo van a ser. Pronostico difíciles. Confianzudos, muy seguros de sí mismos. Yo no tanto. Estoy de vuelta en el día uno. La ironía y la autoridad no salen tan bien en otro idioma tan temprano. "Anything else?" "Miss. Are you married?" "No. Is it relevant?" "It is for you". Siento cada uno de los huesos de mi espalda. De la columna. No puedo relajar los hombros, los dedos están helados. ¿Por qué carajos tienen el aire acondicionado prendido? ¿Con quién habrá que hablar ahora? Ya no está el jefe de manzana que se ocupaba de todo eso. ¿Me irá a tocar a mí volverme lideresa de esta colonia de cubículos? Espero que no, o nos vamos a congelar en un dos por tres. El jueves, que no se me olvide, el TOEFL. Necesito café. Otra vez. Más. Los pantalones café que no-sé-quién dice que son gris Oxford sí calientan pero no tanto. Me gustan mis aretes chandelier de perlitas. A veces creo que sí tengo algo por los precipitamientos. Cuando me encuentro los raspones por todas partes. Cuando me doy cuenta de que estoy toda desportillada. Como una taza que se usa muchas veces. Que se llena y se vacía y se llena y se vacía y se llena y se vacía. A veces de té, a veces de café, a veces de agua, a veces de nada. A veces empalaga, a veces quema, a veces decepciona, a veces reconforta. Ahora con este clima, dura muy poco tiempo caliente. De pronto tiene un raspón. De repente se ha estrellado. Pero aquí está, cómoda. Sola y única. No venía en un set, ni en in kit ni en una vajilla. Verde medio vintage.

1.09.2004

?Por qu? soy tan necia? ?Por qu? no aprendo? Por qu?, si ya le dije dos veces en la misma noche a Brenda que no gracias, no quiero fumar, de repente mi mano alcanza la cajetilla. Si una noche antes llegu? mareada y asqueada. Por necia y tonta. Porque no aprendo. Aysh ?Ser? que no aprendo de veras? Pero me gusta mucho aprender... No s?. Antier se me ocurri? en voz alta que este a?o posiblemente voy a darme por vencida y no voy a comprar agenda, la del 2003 la us? como 10 veces para cuestiones muy de rutina, cosas poco imporantes. Dos veces la us? de diario. Seis de referencia calend?rica. Una en emergencia m?dica. Fue todo. Pablo se apresur? a opinar que, ejem, cada a?o las fechas caen en d?as distintos de la semana. No lo dec?a por reciclar la del 2003, of course. Lo dec?a porque para qu? me hago. Aunque me gustan las agendas, ya no es como antes. Qu? raro. Antes me encantaba, cuando todo era milestone. Cuando sab?a la fecha y hora del primer beso, el tercero, el quinto. Cuando dec?a "hoy hace dos a?os tres meses que me dijo que le gustaba en aquella fiesta". Cuando ten?a juntas y planes y fiestas y tantas cosas imporantes. Cuando sab?a que Tomorrow Never Dies la hab?a visto en 26 de octubre, por ejemplo. Cuando...?cu?ndo? Ahora ya no. Ahora lo apunto todo un d?a antes, en un post it, en alguno de los m?ltiples cuadernitos. En el espejo, el pintarr?n, el coche. Los milestones ya casi no se miden en fechas. Aunque todav?a algunas s?. Como "el s?bado aquel". O "en abril cuando me fui a Sud?frica". O cosas as?. Hoy por ejemplo, hubo inscripciones y tuve las pruebas "biom?dicas". Hoy me enter? de que mido alg?n cent?metro menos, cuyo volumen ascend?a a casi cinco kilos. Mhh Qu? cosa tan interesanta. ?De d?nde podr? ser? O sea, claro, de altura. ?Pero ser? de los pies, de tanto caminar? ?O que ahora mi hairdo es m?s flat? A lo mejor mi ombligo termin? de fugarse con todo y sus cuatro gajos que pueden ser tres. A lo mejor toda la cintura a esa altura se fug? con el de los gajos. Qui?n sabe.

1.06.2004

Ya es día seis y necesito retomar pronto la escribancia. Los cuadernitos están medio en pausa porque necesito de verdad sentarme. Así que por lo pronto volver a las puraspalabras. Siento que debería fijarme algunos propósitos para este año. Los que me propuse el pasado creo que más o menos me salieron. Hubo otras cosas no propuestas que también se concretaron y que me gustaron bastante. Mucho aprendizaje.

- Perseverar en lo del blog/la escribancia. El 2003 fue importante, que el 2004 lo sea más.
- Ejercicio. (Hoy me inscribí en el aerodance. Me da flojera que es diario, que es cardiovascular, que no está Mariana. Pero necesito brincotear y cansarme y ocuparme en algo así). De todas formas no abandonar el yoga por completo (los fines de semana, tal vez?).
- Ser más eficiente en el uso del tiempo (de mi tiempo). Levantarme más temprano, no quedarme a deshoras. Me ha pasado mucho que me quedo hasta tarde en la oficina porque pachorreo o me distraigo. Ya no. La clase de 6 a 7 por la tarde me va a obligar a ser más eficiente, porque voy a tener que desocuparme para esa hora.
- Lograr que me acepten en la maestría. Y CONSEGUIR FINANCIAMIENTO. Irme en Otoño de 2004 (SIPA-SIPA-SIPA-SIPA!!!).
- Hacer algo por los demás. Encontrar un proyecto de voluntariado, algo.
- Poner al corriente la AMEX.
- Conocer un país distinto.
- Festejar en grande mi cumpleaños 25....
- Aprender a hacer MUY BIEN algo diferente: Hacer lasagna entirely from scratch (pasta and all), bailar tango, código HTML, dar masaje, manejar estándar, hablar otro idioma (mmhh), no sé, no sé....
- Ser más constante en la lectura diaria (devocional), y continuar con la otra...

Tengo dos días de estar llegando a horas decentes al trabajo. Espero seguir así. Me siento bien. Me siento P-E-R-F-EC-T-A-M-E-N-T-E (casi, casi). Hoy también estrené zapatos. Me gusta mi cara, mi cuerpo, sigo sin ganas de fumar, me fue bien en el analítico del GRE (llegó ayer), todo bien con los amigos, estoy MUY MOTIVADA. Salvo por las finanzas, todo parece estar en orden. Qué bien. Y ahora, a trabajar.

1.04.2004

Me declaro fans total del Cucumber and Melon Body Cream de The Bath and Body Works. Qué cosa tan maravillosa.

1.03.2004

fantasmas

Estamos viendo "The Shining" en la tele. Mis hermanos la están viendo full-time. Yo voy y vengo haciendo y deshaciendo maletas, guardando ropa, preparando un pan con queso de cabra y tomate.

¿Por qué se volvió loco?

El menor ni siquiera voltea a verme desde su lugar en el piso: Fantasmas.

¿Ve fantasmas?

Hay fantasmas.


Claro.

Etiquetas: